FESTIVAL DE TEATRO DEL TERCER SECTOR.
El Condimento |
Los aficionados sabemos que “en casa” es más fácil arrancar la risa del espectador ; pero estas tres funciones no tuvieron dificultad para ganarse al público de fuera.
El Condimento nos ofreció un juguete cómico de comienzos del siglo pasado. En el trasfondo del argumento están dos cosas de plena actualidad: la dificultad de sobrevivir en circunstancias económicas adversas y los problemas que genera la adaptación a las nuevas tecnologías.
El fotógrafo de Seis retratos tres pesetas, no consigue, ni rebajando el precio, recuperar la inversión en su humilde estudio, pues sus clientes andan tan “pelaos” como él. También tiene que pelear con ellos para que venzan el miedo a colocarse frente a la cámara.
“El Condimento” pone el salero y picardía que requiere la obra. Es imposible no reírse con estas “chirimbolos” de “mediana edad” caracterizadas de hombres perfectamente para la ocasión.
El Condimento |
María, Salomé, Áscen, Maricarmen, Mariajesús, Nieves y Juani lo dan todo a sus personajes para arrancarnos la carcajada y si no lo consiguen a la primera, se entregan en cuerpo y alma con todo su desparpajo hasta recibir el estruendo de la risa del público, lo único que les hace suspirar aliviadas.
Muchas gracias y felicitaciones a estas mujeres que nos demuestran con su osadía que no les frena un teatro hecho para hombres.
Karretabidea |
Estos teatreros de Barasoain quedan las tardes de los domingos para hacer lo que les gusta: teatro. Se nota que disfrutan con ello y lo transmiten desde la primera parodia sobre la gula en que representan la actividad en la cocina de un restaurante de lujo hasta la lujuria que se respira, paradójicamente, en la sala de un juzgado en la causa de un escándalo público.
Son siete piezas cortas que evocan en su puesta en escena el comic más actual, con personajes perfectamente caricaturizados en los que reconocemos enseguida los vicios y defectos de “nuestros amigos”.
La obra no lució, (nunca mejor dicho) lo que merece la cuidada puesta en escena, por un problema de iluminación; pero las interpretaciones brillaron con luz propia; aunque se notó en la energía el comienzo de curso y las dificultades de acceso al escenario que mermaron un poco el ritmillo de la obra.
Tres comedias, pero de muy diferente estilo: la clásica, el vodevil y el comic, nos han hecho disfrutar muchísimo en estas jornadas del festival dedicadas al teatro de cerca. De nuevo gracias a Los Cadalzos, El Condimento y Karretabidea por su aportación al teatro y su colaboración con el festival.
Javier Salvo